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Estudiantes de 42 Madrid y Joanie Lemercier recorren juntos ‘Paisajes de Luz’, la nueva exposición de Espacio Fundación Telefónica
Dos fueron los segundos que transcurrieron hasta que se agotaron las nueve plazas disponibles para estudiantes del campus de programación de Fundación Telefónica. Además, la lista de espera era de decenas. Una tarde en la que el artista galo desgranó de manera privada los detalles de una exposición que promete dejar huella en Madrid. Los estudiantes pudieron preguntar a Lemercier todo lo que desearon sobre tanto programación como su visión artística. No podemos afirmar que le pusieron en algún aprieto, pero sí que surgieron debates interesantes.
‘Joanie Lemercier. Paisajes de luz’ es la primera gran exposición individual del artista francés. Pionero del videomapping y la tecnología creativa, propone una inmersión por paisajes que invitan a contemplar y salvaguardar la naturaleza. Líneas abstractas, sobrias y geométricas se unen en siete instalaciones audiovisuales en las que la protagonista absoluta es la luz. En la primera parte del recorrido, en penumbra, Lemercier expone su experiencia con la programación digital y presenta a los espectadores una distorsión de la realidad en lo que realmente se trata de paisajes imaginarios que hacen de la naturaleza una obra de arte. Sin duda, esta mitad inicial del recorrido del espacio expositivo de Fundación Telefónica en Gran Vía fue el detonante y la excusa para planear la visita desde el campus. “La forma en que usa la tecnología y el software para jugar con la estética minimalista y romper con la barrera de la pantalla y traspasar fronteras para brindar una experiencia inmersiva. Fue un placer asistir a la exposición acompañados de Joanie y disfrutar de esta experiencia”, afirma Francisco, uno de los estudiantes de 42 Madrid que se acercó a Espacio Fundación Telefónica.
La experiencia que plantea Lemercier no deja indiferente a nadie, independientemente del interés y conocimiento que se tenga de las tecnologías que utiliza. Es una experiencia sensorial que invita a reflexionar. “Trabajo extraordinario e inspirador. Absolutamente agradecida por esta experiencia con el artista y la comisaria”, declara Ana. Por su parte, Bruno transmite que fue “una muy buena exposición, con claroscuros muy interesantes sobre el consumo y la tecnología. Llamativa también la dualidad del artista a la hora de utilizar la tecnología para reivindicar su uso más responsable”. Visto el éxito de la “excursión”, ya estamos planeando otras visitas guiadas.
A través de la programación informática y la manipulación de dispositivos, el artista galo consigue convertir los proyectores en una fuente de luz capaz de transformar la apariencia de las cosas y hacer cuestionar la concepción de la realidad. «La luz como medio, el espacio como lienzo» es la premisa sobre la que se asienta el cuerpo de trabajo de estas instalaciones. La exposición, comisariada por Juliette Bibasse, y que también acompañó a los estudiantes, aborda la importancia de la naturaleza en la trayectoria vital y artística de Lemercier y plantea una reflexión sobre la representación del medio natural a través de la tecnología.
Rejillas, geometrías y líneas, mediante las cuales el artista galo explora un paisaje tecnológico. Lemercier muestra paisajes inspirados en lugares naturales, leyendas ancestrales o experiencias personales, pero también geografías imaginarias nacidas de la colaboración entre el ser humano y la máquina. De hecho, en la obra Montagne, cent quatorze mille polygones, un valle rodeado por montañas creado a partir de una retícula distorsionada por un algoritmo pone de manifiesto la difusa línea entre lo que consideramos real y la simulación generada mediante funciones matemáticas. Por obras como esta decíamos anteriormente que el artista invita a la reflexión.
De su deseo por mostrar la colaboración entre el ser humano y la máquina en el proceso creativo, surge Paysages Possibles. En un principio, Lemercier emplea únicamente un bolígrafo sobre papel para llevar a cabo sus dibujos, pero inspirado por la pionera del arte digital Vera Molnar, comienza a utilizar el plóter, que le permite obtener imágenes de mayor tamaño a partir de líneas continuas. Con Paysages Possibles, el plóter actúa como extensión de la mano del artista mediante el uso de un software que va progresivamente dibujando un particular universo de montañas. Con el paso de las horas, los dibujos finalizados se cuelgan en las paredes, mostrando así las pruebas y errores surgidos de los fallos del propio software, que forman parte del proceso creativo de la obra
La muestra podrá verse de manera gratuita, previa reserva en la web de Espacio Fundación Telefónica, en la planta 4 desde el 11 de febrero hasta el 25 de julio de 2021.
¡Te animamos a visitarla!
