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Guía de motivación galáctica

La motivación es un factor poderoso, pero esquivo. A veces, la sentimos con una potencia enorme y nos vemos capaces de conseguirlo todo. Poco después, puede desaparecer sin más, dejándonos sin fuerza y con una extraña sensación de vacío. ¿La razón más habitual? Nos olvidamos de nuestros objetivos. Te invitamos a leer una pequeña historia sobre motivación acontecida en 42 Madrid.

42 Madrid Fundacion Telefonica

“Muchachos, ¿cómo se recupera la motivación?” Si Pablo se animó a preguntar eso en un foro interno del campus es porque no dudaba de que iba a encontrar la ayuda de sus compañeros, como así sucedió. Con lo que probablemente no contaba es que uno de ellos, David, fuera un paso más allá y elaborara lo que decidió llamar “Manual de arranque para recuperar la motivación”. La encontrarás si sigues leyendo, unos párrafos más abajo.

Precisamente, David es uno de los estudiantes que más ha avanzado en lo que llamamos el 42 cursus (mensaje para reclutadores y personas curiosas, este es su LinkedIn). Uno de los puntos claves de 42 es que tanto la metodología como los contenidos se ven sometidos a constantes actualizaciones con el fin de adaptarse al momento y a las necesidades del mercado laboral. De hecho, la totalidad de los estudiantes del campus de Madrid siempre tienen a su disposición las últimas versiones de los proyectos. A David le ha encajado la metodología, aunque, como todas las personas que se atreven a lanzarse a la piscina, contaba con cierta incertidumbre. Nos revela que “decidí probar suerte en la piscina por lo disruptivo e innovador que parecía el concepto de 42, por la libertad de horarios y por la proyección profesional que ofrece. Ahora, tras cuatro lenguajes de programación, un buen puñado de herramientas y frameworks, y muchas horas frente al ordenador, cada vez tengo más claro que acerté presentándome y tuve suerte de ser admitido”. Aunque tengamos que contradecirle, garantizamos que la suerte no tuvo nada que ver.

La reciente adaptación al trabajo en remoto que muchos estudiantes han tenido que adoptar por diversas razones no ha sido igual de sencilla para todos, aunque el campus de Distrito Telefónica lleva abierto meses, tiene vida y han vuelto a celebrarse piscinas. Desconectar es más sencillo por el cambio de rutinas y la sustitución de elementos esenciales como la presencialidad. Afortunadamente, desde muy pronto habilitamos las herramientas necesarias para que la formación no se viera interrumpida. La tolerancia a la frustración y la adaptabilidad son clave en el campus. Aun así, somos conscientes que son tiempos en los que sentarse frente al ordenador en casa, quizás, resulte más complicado de lo habitual. 

“Había programado algo en la universidad, años atrás, pero durante la piscina descubrí que lo que sabía era solo una pequeña parte de todo lo que iba a aprender después”, nos confiesa David. Aunque lleva meses haciendo proyectos sobre machine learning, la ciberseguridad también le llama la atención. Es más, no pasará mucho tiempo hasta que tenga la posibilidad de probar ambas ramas dentro del plan de estudios de 42 y ver hasta dónde llega.

Lo prometido es deuda y aquí el sencillo pero genial manual que preparó David para Pablo y para toda la comunidad 42. Podría ser válido para estudiar programación, pero también otra cosa. Solo se trata de recuperar la motivación por algo que nos encanta.

Manual de arranque para recuperar la motivación, por David Rodríguez

Con la pandemia, es posible que te hayas desconectado de 42, y sentarte frente al ordenador quizás resulte mucho más complicado de lo que parece. No todo está perdido, hay varias cosas que puedes hacer para que reconducir el camino y volver a entregar proyectos.

  • Crea un hábito. Es difícil pasar ocho horas diarias haciendo lo mismo si no estás acostumbrado. En la piscina teníamos una motivación muy fuerte, pero ahora no hay plazos, y los objetivos se pueden difuminar en el horizonte. Pueden pasar varias semanas hasta que tu mente interiorice de nuevo la forma de trabajar de 42.
  • Define metas pequeñas. Divide tu proyecto actual en partes, o haz otros proyectos en paralelo para despejar tu mente.
  • Vuelve al campus. Aunque tenemos la posibilidad de trabajar en remoto, las distracciones y la soledad pueden hacer que el concepto de aprender de forma autodidacta sea mucho más duro estando encerrado en casa. La metodología fue diseñada para ser presencial, y a muchos de nosotros nos funciona mejor así. Puede que algunas personas trabajen bien en remoto, pero a otras les cuesta mucho más.
  • Conecta con tus compañeros. Tanto de forma presencial, como en las redes, es importante hacer piña, encontrar un compañero o un grupo en el que estés cómodo y te ayude a avanzar. No es necesario que estén trabajando en el mismo proyecto que tú. Si la situación actual te impide estar físicamente en el campus, puedes usar Slack, o Discord, donde hay un sistema de “Squads” que te conecta con compañeros para trabajar en un proyecto.
  • Crea un entorno agradable. Hay que estar cómodo también en el entorno digital. Elige un IDE que te guste, personalízalo, familiarízate (de nuevo) con las herramientas que vas a usar en los próximos meses, y dedícale tiempo a aprender sobre ello. Conocer bien el entorno de trabajo puede agilizar mucho el aprendizaje y ahorrar tiempo.
  • No tengas miedo de pedir ayuda y preguntar. En este juego no hay profesores, nos necesitamos los unos a los otros, y quedarse atascado es peligrosamente fácil. También puedes pedir que un patrocinador te aconseje durante un tiempo.

Recuerda qué te llevó a adentrarte en esta metodología. La situación que estamos pasando no acompaña, pero en 42, la mayor fuente de motivación está en ti mismo.

Publicación original del manual en Medium, por David Rodríguez Elipe